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"No hay en todo el vasto y oscuro mundo de espectros y demonios ninguna criatura tan terrible, tan temida y aborrecida, y aun asi aureolada por una aterradora fascinación como el Vampiro, que en si mismo no es espectro ni demonio pero comparte con ellos su naturaleza oscura y posee las misteriosas y terribles cualidades de ambos."

lunes, 4 de enero de 2010

Crónicas de un Visita Esperada cap4



Capítulo 4. Clavel Rojo
Aparecí en mi habitación y me vi a mi misma durmiendo, note que era demasiado consiente para que fuese un sueño como los que había tenido algunas veces, antes de estos últimos dos meses.

Edward no había llegado aún y como la noche anterior mi sueño se cambio de escenario al de su casa.

Aparecí en la calida sala, y la recorrí espectralmente, dándome la sensación de vuelo. Todo era tan detallado que me hacia concebir esperanza nuevamente.

Encontré unas grandes escaleras y me deslice al piso de arriba, vi un cuadro con cientos de gorros de graduación, me pregunte porque habría tantos… seguí subiendo y varias puertas se hicieron ver, escuche risas de una, la televisión en otra y al final había una abierta. Flote rápidamente hasta allí y pase a la habitación, toda blanca, y con innumerables discos, CDS y Cassetts, así como un enorme reproductor y televisor plasma. Note que no había cama, y la pared había sido sustituida por un enorme vidrio que dejaba entre ver un bosque.

Algo me traspaso, me penetro completamente, Era Edward que había entrado a la habitación pasando sobre mí.

Saco un objeto de una cajita, era un brazalete, y era mío… - vampiro ladrón – dije casi riendo – lo beso con ternura y lo guardo con devoción en la cajita como si fuese un tesoro valioso. –toc toc – toco Alice- pasa Mounstrito – dijo Edward – ten Hermanito, ponle esto en su mesa de noche, he visto que le gustara – dijo Alice extendiéndole un clavel rojo, - Edward esbozo una sonrisa en respuesta. – Gracias Alice si que le gustara. –

De pronto una sensación de irritabilidad inundo el ambiente y a mi. - ¿Por qué? – pregunto Edward y sentí que me había perdido de algo. – porque hace un rato sintió lo mismo de ayer, la presencia de emociones sin un cuerpo… y eso le irrita, siente que se esta volviendo loco al no encontrar una razón coherente.

-Tal vez tengamos fantasmas- dijo Edward y ambos se carcajearon. – Claro Edward… no es suficiente con que vivamos 7 vampiros, ahora son el fantasma y los 7 vampiros.

Rieron un rato y yo quede helada… como era eso de ¿vampiros? Ahora si me había vuelto loca. Ángel o Vampiro, el era alguien hermoso en todos los sentidos.

Edward salto sobre Alice a una velocidad tal que no pude verlo, mientras se carcajeaban y esta se corría un centímetro para luego saltar sobre su espalda a la misma velocidad de Edward. Todo era muy confuso…

Sin más Edward abrió la gran ventana de vidrio y salto. Desapareció entre el bosque y solo seguí a Alice que se estaba devolviendo a su habitación.

- ya se fue Edward amor, - le dijo a Jasper. – Entonces no es el… sigo sintiendo la maraña de emociones y esta junto a ti. – Tal vez si tengamos fantasmas después de todo. – No seas tonta mi amor, eso no es posible, supongo que me estoy volviendo loco.

-Tal vez te haga falta cazar. Edward acaba de ir al bosque a ver si encuentra algún siervo para no tener sed cuando vea a Kristen - ¿Quién demonios es Kristen? – la humana a quien Edward ama… - Oh lo siento.. No sabía su nombre. Bueno vamos a ver si lo alcanzamos. Como esta de ansioso seguro se come medio siervo para ir a verla mas rápido.

-Eso me enterneció, Alice y Jasper fueron junto a la ventana pero esta vez me sostuve del vestido de Alice.

Saltaron a una velocidad asombrosa y aterrizaron muy sigilosos, para luego echar a correr de manera espectral por el bosque.

Entre mi confusión vi a Edward “cazando”, lo que consistía en que tomaba un siervo y sin saber como lo hacia por que son extremadamente rápidos lo atrapaba, se pegaba a su cuello hasta que el animal caía inerte. Se bebía su sangre… - me repetí a mi misma…Estaba tan confundida que no podía asustarme, después de todo no sabia si esto era ficción o realidad…

Me guinde a Edward así como lo hice con Alice y vi como recorrimos unas calles hasta llegar a la mía; Edward trepo el edificio con suma tranquilidad, paso por unos barrotes que estaban fuertemente doblados. Que reconocí que eran los que bordeaban el ventanal desde la esquina de mi apartamento, y tomo su posición de siempre en el espacio de mi ventana.

-Edward…- comencé – y este se inquieto. – Edward se lo que eres… te acepto… y te amo- dije sin pensar en la realidad de mis palabras… si el fuese real, y fuese un Vampiro, de verdad lo aceptaría? Los pronósticos de mi corazón zumbaban afirmativamente. – vi confusión en sus rasgos perfectos. – A caso ya tu corazón tiene un dueño? – Dijo melancólicamente – solo tu… mi ángel…- las palabras salían de mi cuerpo inerte como murmullos adormilados, sin embargo se entendían. – su rostro seguía confundido.

Siguió con la misma expresión toda la noche, mientra yo jugaba en vano a acariciarlo. Hasta que el sol comenzó a imponerse. Saco un clavel rojo de su bolsillo y lo coloco en mi mesa de noche. Acto seguido desapareció espectralmente.

Quise seguirlo, pero la alarma de mi despertador hizo que el vacío se apoderara de mí y despertara.

Lo primero que hice fue voltear a la mesita de noche, y algo salto dentro de mí cuando note un clavel rojo sobre ella. Esta era la prueba. El era real. Sonreí abiertamente y bese la flor con delicadeza.

3 comentarios:

Kassandra H. dijo...
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
Kassandra H. dijo...

aaahy que hermoso capitulo, amo la historia :)

Anónimo dijo...

esta hermosa esta historia, acabo de encontrar este espacio, felicidades escribes muy bien, espero sigas haciendolo siempre y mas si es de la saga crepusculo........la amo

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